Una tormenta como ninguna otra
En lo que muchos llaman un giro inesperado de la naturaleza, los estados de Nueva Inglaterra se encontraron bajo el yugo de un inusual nor’easter de mayo. Cuando la tormenta finalmente comenzó a alejarse de la región el viernes, dejó a su paso temperaturas frías rompedoras de récords y lluvias significativas. Massachusetts y Rhode Island soportaron la peor parte de la furia climática, con Kingston, Massachusetts, registrando la asombrosa cantidad de 7.13 pulgadas de lluvia en tan solo 24 horas.
Un Día de los Caídos húmedo y helado
Como se establece en Times Colonist, este inusual evento climático ha impactado enormemente las preparaciones para el Día de los Caídos. Aunque la lluvia no es del todo imprevista durante esta temporada, la nieve ciertamente lo es. En elevaciones más altas, notablemente en el Monte Washington de New Hampshire, hubo 3.4 pulgadas de nieve. Muchos eventos locales, como la apertura del club de golf de Sugarloaf Mountain, enfrentaron retrasos debido a las adversas condiciones.
Temperaturas históricas
Las temperaturas cayeron a niveles raramente vistos en mayo, con algunas ciudades, como Concord en New Hampshire y Portland en Maine, experimentando temperaturas máximas frías récord. Concord alcanzó una gélida temperatura de 47 grados Fahrenheit, superando el viejo récord establecido en 1939; un testimonio de la histórica naturaleza de la tormenta.
No es tu típico nor’easter
Los nor’easters son típicamente sinónimos de los meses fríos de finales de otoño e invierno, trayendo vientos poderosos y fuertes precipitaciones a las regiones de la Costa Este. Sin embargo, su presencia en mayo es tan rara como no deseada. El actual nor’easter nos recordó drásticamente su potencial para causar caos climático, independientemente de la estación.
Respuesta y preparación comunitaria
A pesar de la severidad de la tormenta, las comunidades de Nueva Inglaterra mostraron una notable resiliencia y preparación. Afortunadamente, no hubo reportes de lesiones, aunque la tormenta dejó a conductores varados en aguas inundadas en Cape Cod y calles llenas de árboles caídos. Este evento subraya la importancia de estar preparado para eventos climáticos inesperados, sin importar la época del año.
Mirando hacia adelante
Con la tormenta retirándose, los habitantes de Nueva Inglaterra esperan un regreso a días más cálidos y soleados. Mientras se preparan para observar el fin de semana del Día de los Caídos bajo condiciones más habituales de primavera, este raro nor’easter de mayo servirá como un capítulo memorable en la historia meteorológica de la región.